Fotografia. Redaccion RI.
Ayer en rueda de prensa el Cardenal de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega, ofreció una evaluación contundente sobre la gestión del Presidente Andrés Manuel López Obrador, afirmando que su legado es un país en peores condiciones de las que heredó. Las palabras del religioso resuenan en un contexto donde se percibe un aumento de expectativas hacia el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum.
Robles Ortega reconoció las adversidades que enfrentó el presidente saliente al asumir el cargo: “El Presidente saliente recibió un país en situación difícil, por eso el pueblo depositó su esperanza en él”. Sin embargo, su análisis crítico señala que, a pesar de las dificultades iniciales, la impresión general es que López Obrador deja un país con mayores rezagos en áreas fundamentales como salud, educación y seguridad.
El Cardenal apuntó directamente a la creciente preocupación por el deterioro de las instituciones y el respeto por la ley. “Tristemente, hay un cambio no para mejor”, lamentó, enfatizando la necesidad urgente de atención a estos temas críticos.
Con la vista puesta en el futuro, Robles Ortega expresó su confianza en que la nueva presidenta Claudia Sheinbaum desempeñará un papel clave en la reconstrucción del tejido social y político de México. Sin embargo, su llamado a las nuevas autoridades no se limitó solo a expectativas, sino que subrayó la importancia de la honestidad y el compromiso con los ciudadanos.
“Las comunidades esperan que sus gobernantes estén a la altura de sus necesidades”, indicó el Cardenal, demandando sensibilidad y dedicación en el servicio público. Robles Ortega hizo hincapié en que los funcionarios deben rechazar la tentación de servirse a sí mismos y recordar que han sido elegidos para servir a la población.
A medida que el país se prepara para una nueva etapa, las palabras del Cardenal resuenan como un recordatorio de la responsabilidad que recae en los hombros de los futuros líderes. Solo el tiempo dirá si se atenderán los llamados de la comunidad y se logrará avanzar hacia un México más equitativo y justo, acorde con las necesidades de su gente.
