
Canadá se alista para su primera participación como país sede en una Copa Mundial de la FIFA, y Toronto y Vancouver encabezan los preparativos para recibir a miles de visitantes en 2026. Más allá de los encuentros futbolísticos, ambas ciudades buscan mostrar al mundo su oferta cultural, gastronómica y de entretenimiento, que las convierte en destinos ideales durante todo el verano mundialista.
En Toronto, donde se disputarán seis partidos —incluido el debut de la selección canadiense el 12 de junio en el BMO Field—, el ambiente deportivo se mezcla con una vibrante vida cultural. Festivales como Luminato, NXNE, Salsa in St. Clair y el Toronto Jazz Fest prometen llenar de música y baile las calles, mientras que sitios emblemáticos como la CN Tower, el Acuario Ripley o el Royal Ontario Museum se mantienen como imperdibles para quienes deseen combinar futbol y turismo urbano.
Vancouver, por su parte, será la sede con más actividad al albergar siete encuentros en el BC Place Stadium, incluido un partido de octavos de final. La ciudad de la Costa Oeste aprovechará su entorno natural para cautivar a los aficionados, que podrán recorrer la Montaña Grouse, el Puente Colgante de Capilano o el Jardín Botánico VanDusen. Por las noches, los mercados ambulantes —como el Mercado Nocturno de los Astilleros o el de Richmond— ofrecerán comida internacional, música y una atmósfera veraniega inigualable.
Conectividad aérea y turismo irán de la mano durante la justa deportiva. Air Canada anunció múltiples vuelos directos desde Ciudad de México, Monterrey y Cancún hacia ambas sedes, con el objetivo de facilitar los viajes de los aficionados y promover la exploración de los paisajes y ciudades canadienses más allá del Mundial.

