
Nayarit es un destino que cautiva con sus playas, Pueblos Mágicos y una rica tradición cultural. Entre sus mayores tesoros están las comunidades wixárika y cora, que han mantenido vivas sus costumbres y cosmovisión a lo largo de los siglos. Un ejemplo de ello es Tatéi Haramara, la isla sagrada ubicada en San Blas, donde los wixárikas rinden tributo a Haramara, la Diosa del Mar, en un ritual abierto a visitantes que desean conocer más sobre sus creencias ancestrales.
Los coras, por su parte, también preservan sus festividades tradicionales, como la Fiesta del Tambor y el Festival del Maíz, que celebran la fertilidad de la tierra y la importancia de la cosecha. Destaca la Semana Santa Cora, donde fusionan elementos del catolicismo con su propia cosmovisión, dando lugar a un evento espiritual único, lleno de simbolismo y participación comunitaria.
Más allá de sus rituales, Nayarit invita a explorar su historia y naturaleza, desde los vestigios de su pasado portuario hasta el fascinante cocodrilario. Con una oferta cultural y ecológica inigualable, este estado se posiciona como un destino imperdible para viajeros en busca de experiencias auténticas.