
Ante la creciente tensión en las negociaciones con la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (ALPA), Air Canada anunció que está preparando planes de contingencia para una posible suspensión gradual de sus operaciones a partir del 15 de septiembre de 2024. Las conversaciones entre la aerolínea y ALPA, que representa a más de 5,200 pilotos de Air Canada y Air Canada Rouge, han llegado a un punto crítico debido a las demandas salariales que la empresa considera excesivas.
Michael Rousseau, presidente y CEO de Air Canada, señaló que, aunque aún hay tiempo para llegar a un acuerdo, el paro laboral es cada vez más probable. «Es fundamental proteger a nuestros clientes de un paro abrupto, lo que nos obliga a considerar la difícil decisión de iniciar un cierre ordenado de nuestras operaciones», declaró Rousseau. La suspensión podría comenzar tan pronto como el 15 de septiembre, si se emite un preaviso de huelga o cierre con 72 horas de anticipación.
Air Canada ha instado a sus clientes a utilizar su política de buena voluntad para cambiar o aplazar viajes inminentes sin costo alguno, minimizando así el riesgo de quedarse varados. Aunque los vuelos de Air Canada Express, operados por terceros como Jazz y PAL Airlines, seguirán en funcionamiento, solo transportan alrededor del 20% de los pasajeros diarios, muchos de los cuales dependen de conexiones con vuelos de Air Canada.
La aerolínea ha alertado al Gobierno de Canadá sobre el impacto potencial de esta interrupción en los viajeros y ha reiterado su compromiso de llegar a un acuerdo que evite una paralización que afectaría a más de 110 mil personas diariamente.