Las labores de protección y vigilancia estarán a cargo de Protección Civil y Bomberos de Jalisco, así como de la Policía Estatal y la Policía Via
Este próximo sábado 12 de octubre, la ciudad de Guadalajara se preparará para recibir aproximadamente 2.2 millones de peregrinos que participarán en la tradicional Romería, el evento que marca el regreso de la Virgen de Zapopan a la Basílica. Con un despliegue de seguridad sin precedentes, alrededor de mil elementos de diversas dependencias tanto municipales como estatales estarán velando por la integridad de todos los asistentes.
La alcaldesa de Guadalajara, Verónica Delgadillo, ha detallado que de estas fuerzas, cerca de dos mil son policías del ayuntamiento tapatío, complementados por dos mil 500 elementos del municipio de Zapopan, además de la participación de la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos de Jalisco. “Estamos trabajando de manera coordinada para garantizar la seguridad de todos los asistentes durante esta edición número 290 de la Romería. Será un evento donde la fe y la tradición se unen para mantener el orden y la paz,” enfatizó Delgadillo.
La ruta de la Romería, que se extiende por 9.2 kilómetros desde la Catedral de Guadalajara hasta la Basílica de Zapopan, tendrá un recorrido mayoritariamente bajo la jurisdicción de Guadalajara. Por su parte, el alcalde de Zapopan, Juan José Frangie, ha instado a la población a mantenerse informada sobre los cierres viales que comenzarán la noche del jueves 10 de octubre, en un esfuerzo por facilitar el tránsito y la seguridad en los alrededores.
Además, se espera la instalación de cerca de mil puestos de venta a lo largo del recorrido. Con la finalidad de preservar el ambiente familiar y respetar la “Ley Seca” en una zona delimitada, se prohibirá la venta de gas LP y bebidas alcohólicas. “La venta de bebidas estará restringida a los restaurantes locales, asegurando así que todos cumplan con esta normativa,” señaló Frangie.
El arzobispo de Guadalajara, Francisco Robles Ortega, también ha querido resaltar la dimensión espiritual de este evento, destacando el lema de este año: “María Madre Evangelizadora”. “No es solo un desfile; es una auténtica peregrinación donde se nos recuerda nuestra condición de peregrinos en la vida. Debemos compartir el camino y tener empatía hacia los que más necesitan,” expresó el arzobispo, quien también hizo eco del enfoque universal de las intenciones para la misa, que abarcarán desde agradecimientos hasta oraciones por la paz en medio de conflictos actuales.
Con un amplio despliegue de medidas de seguridad y un compromiso por parte de las autoridades de garantizar una celebración tranquila, se ha establecido una mesa interinstitucional permanente que funcionará hasta el final de la Romería. Este esfuerzo conjunto reafirma el carácter de Patrimonio Inmaterial que la UNESCO ha otorgado a esta importante tradición.
La comunidad está invitada a participar en un evento que es mucho más que un recorrido religioso: es una celebración de identidad, de fe y responsabilidad social. Con respeto y devoción, la Romería 2024 se perfila como una experiencia única tanto en lo espiritual como en lo organizativo.
