Fotografia: Aldo Sanchez.
Ante la inminente posibilidad de una deportación masiva de migrantes mexicanos por parte del Gobierno de Estados Unidos, el estado de Jalisco ha puesto en marcha un plan integral para recibir a quienes puedan ser afectados. El gobernador Pablo Lemus anunció que ya se han habilitado siete albergues y, en caso de que la situación lo demande, se abrirá el Auditorio Benito Juárez para garantizar condiciones dignas a los deportados.
Lemus expresó su preocupación por los rumores de que la deportación podría realizarse esta misma semana. «Es probable que vaya a suceder una deportación esta misma semana, por eso estamos preparados desde hoy», declaró. Aunque el estado espera que esta contingencia no se materialice, está listo para actuar en cuanto se conozcan los detalles sobre el traslado de los migrantes desde Estados Unidos.
La logística para el traslado de los deportados ya está en marcha, aunque aún no se ha determinado si llegarán por vía aérea o terrestre. En caso de que sean enviados a Tijuana, se facilitará el transporte hacia Jalisco mediante autobuses. Además, se contempla la posibilidad de cubrir los gastos de traslado a los municipios de destino dentro del estado.
Las autoridades de la Universidad de Guadalajara están colaborando para adaptar sus instalaciones en el Bosque de la Primavera como un albergue, y el Auditorio Benito Juárez se reserva como una opción adicional en caso de que la situación sea masiva.
Este despliegue de recursos se produce en un contexto de creciente preocupación por la migración, que se ha intensificado desde la llegada del nuevo presidente estadounidense. En este sentido, se ha llevado a cabo una reunión entre la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Isela Rodríguez, y varios gobernadores para abordar la problemática migratoria.
En cuanto a la reintegración de los deportados al mercado laboral, el gobernador Lemus subrayó que Jalisco presenta una de las tasas de desempleo más bajas del país, lo que podría facilitar la inserción laboral de los migrantes. Muchos de ellos cuentan con habilidades en áreas como la construcción, fontanería, electricidad y jardinería. «Si allá no los quieren, en Jalisco los recibimos con las puertas abiertas. Necesitamos personal calificado y estamos listos para ofrecerles oportunidades», concluyó Lemus.
